MI PRIMER GRUPAL

Mi nombre es Iván, mis amigos me llaman Van, soy Pirata por ciertas habilidades informaticas que no vienen al caso y Licantropo por correr en mis venas la sangre de Lycaon… Soy un lobo mi mundo ha sido la noche y los placeres que la luna me proporciona… la sensualidad de la silueta de una mujer en mi lecho en la penumbra de la noche, ha sido mi motivación y forma de vida.

Al momento tengo 40 años, de los cuales he dedicado más de 25 a, la búsqueda del placer en sus diferentes formas y manifestaciones… todo comenzó cuando tenía 15… el hermano mayor de mi mejor amigo era un hippie de unos 24 a ese tiempo; Juan Carlos (mi mejor amigo) y yo comenzábamos a farrear en ese entonces y eventualmente nos encontrábamos con Dixi (así apodaban a su hermano)… ese sábado fue particularmente movido, pasamos de una a otra fiesta y de allí de uno a otro bar; como a la 1h30 pasamos a Munchies un bar de rock viejo y nos encontramos con Dixi y sus amigos, tres tipos de cabellos largos y una docena de mujeres cuatro ecuatorianas y 6 israelitas; las ecuatorianas eran peladas de Dixi y sus amigos y las israelitas, eran mochileras que estaban recorriendo América.

Yo estaba embelesado… definitivamente nunca vi una mujer tan bella… se llama Salwa me dijo Dixi mientras hacía gesto de cerrarme la boca (para que no se me caiga la baba); bailamos y tomamos cerveza hasta las 4 am… o al menos hasta esa hora llegue yo; la falta de costumbre de beber y la mala noche me hicieron dormir sobre una mesa.

Entre sueños veía como me cargaban de un lado a otro; decidieron que fuéramos todos a casa de Salwa por estar más cerca… mi borrachera de 15 fue impresionante; me recostaron en una cama, me tuvieron que llevar casi cargado por tres ocasiones a vomitar, Juan Carlos en mejores condiciones que yo, ya se recuperaba, mientras los más grandes fumaban mariguana en la sala y seguían con el Rock & Roll.

Mi letargo se convirtió en sueño… profundo sueño… no sé cuantas horas dormí… cuantos siglos… desperté más viejo… más hombre… desperté por sentir que había más gente en la cama… Dios… que visión… Salwa, Samia, Ruth, Ana, Ramia, y Trudie, seis preciosas sexis y jóvenes mujeres, estaban desnudas en la misma cama que yo… que delicia de cuerpos… profundamente dormidas por efecto de la juerga, el trago y la hierba… no me atrevía a moverme… no quería despertarlas y que se termine esta visión… mis pantalones estaban por reventar… tenía una erección colosal… no pude evitarlo comencé a tocarme… desabotone mi pantalón y en una mezcla de excitación y vergüenza, mi mano se deslizaba sobre mi entrepierna… no pude seguir conteniéndome y disimuladamente comencé a rozar los cuerpos de las dos mujeres que estaban más cerca de mi… muy suave… casi imperceptible, como si fuera un movimiento producido por el sueño y la estreches de la cama… rosaba sus pezones, sus sexos… acariciaba sus nalgas… Salwa gimió un par de veces… a su vez ella comenzó a acariciar el cuerpo que tenia junto a ella, mientras despertaba… de pronto todas comenzaron a despertar con las caricias que cada una le prodigaba a la otra… era como si yo no estuviera allí… como si no me vieran… sin reparar en absoluto en mí las seis bellas mujeres se acariciaban y besaban entre sí… yo no podía más… pese a la enorme vergüenza y falta de experiencia en estos temas, comencé a acariciar a Salwa; tome su mano y la acerque a mi… ella casi sin tomarme en cuenta, me acariciaba el pecho, el vientre, poco a poco sus amigas se fueron haciendo concientes de que yo también existía… sus manos comenzaron a acariciarme y las mias a ellas… sus bocas se encontraban con la mia y nuestras lenguas se enlazaban en una danza de pasión; unas manos aprisionaban mi pene y una boca se lo arrebataba de súbito, mi boca lamia senos y sexos de distinto color y tamaño, el placer y la excitación que sentía, me enloquecían, la visión de estas hermosas mujeres lamiéndose y acariciándose entre sí y prodigándome caricias sin fin, los cuerpos sudorosos, los varios pares de manos y el intenso olor a sexo que inundaba toda la habitación, me llevaron a estallar en la boca de Ramia; mi semen brotaba a borbotones… Salwa también lo llevo a sus labios para saborearme… luego un beso profundo en los labios y todas a nuestro alrededor acariciándonos… la magia de los 15 años la energía vital en un caudal inimaginable, hizo que casi de inmediato tuviera otra erección, tal como en mi sueño más caliente, mi pene paseo su erección por las vaginas culitos y bocas de estas seis bellezas judías, un espectáculo sin igual era ver y sentir a Salwa en cuatro recibiéndome en su sexo, mientras Ana bajo ella disfrutaba de un 69 perfecto, en el que en cada lamida al sexo de Salwa, su lengua recorría también mi pene o testículos.

El día transcurrió igual a como comenzó… apasionado, lleno de lujuria, de sexo… una y otra vez la historia se repitió… una y otra vez una mano inocente que rozaba el cuerpo de alguien, desencadenaba el desenfreno… una y otra vez… los cuerpos desnudos, los sexos dispuestos, 6 bellas mujeres dispuestas siempre a gozar y sin ningún escrúpulo al hacerlo y un chico de 15 con la carga de hormonas que eso significa y con el total deseo de aprender cómo hacer gozar a una o varias mujeres… y como conseguir placer… lo que después se convertiría en mi razón de vivir… mi leif motiv

Sin duda alguna ese fue el inicio de mi gusto por el sexo grupal, el voyerismo, el sexo en público y algunas otras de las variantes que he disfrutado por años y que me covirtieron en quien soy.